Lee este artículo del periódico El País sobre
las repercusiones del bisfenol A en nuestra salud y en el medioambiente. Responde verdadero o falso a las afirmaciones
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“¿Por qué deberías rechazar ya el 'ticket' de
la compra, aunque la prohibición entre en vigor en 2020?” de Manuela Sanoja.
Vamos a la pescadería y la persona que nos
atiende mete el ticket de la compra dentro de la bolsa donde están las merluzas
que hemos comprado. Un gesto que probablemente todos hemos vivido y con el que
el catedrático de Radiología en la Universidad de Granada, Nicolás Olea, se
lleva las manos a la cabeza porque el papel con el que se elabora la mayor
parte de los recibos contiene un elemento dañino para la salud y el medio
ambiente: el bisfenol A (BPA), una sustancia que afecta sobre todo a las
mujeres embarazadas ya que puede provocar, entre otras cosas, malformaciones en
los fetos y contaminar las partidas de papel reciclado.
"Es un compuesto que
se utilizó durante los años 50 para tratar a mujeres embarazadas en riesgo de
sufrir un aborto y que se dejó de usar porque se descubrió que causaba
cáncer", explica Olea. El BPA, mientras tanto, "se limitó al ámbito
industrial para sintetizar plásticos, pasando desapercibidas sus
consecuencias", asegura el experto. Al menos hasta el año 1995, cuando
Olea y su equipo publicaron un estudio en el que concluían que las latas de
alimentos en conserva contenían este químico en su interior.
Desde entonces, son muchas
las investigaciones que han llevado a cabo y que han ido desvelando la gravedad
del problema: "En el 96 supimos que también estaba en los dentífricos; en
el 98, en los biberones; y, el año pasado (2018), que el 100% de las personas
—adultas y menores— lo tiene en su orina por el contacto con materiales como el
papel térmico con el que se elaboran los tickets de la compra", asegura
Olea, quien añade que no podemos considerar normal evacuar plástico.
A diferencia del caso de
los biberones, donde la sustancia solo cede cuando se hierven, el problema con
los tickets es que "es de los pocos productos donde el BPA está libre ",
indica Olea. Esto quiere decir que no forma una sola cadena de moléculas, sino
que la sustancia está suelta. Es ese polvo blanco que aparece en este tipo de
papeles con el paso de los días y que, a través del contacto, puede pasar a
nuestro organismo, lo que puede ocasionar riesgos en algunos puestos de
trabajo.
A pesar de que todos estamos expuestos a este
químico a través de los distintos recibos que recibimos cada vez que realizamos
una compra —el 90% de ellos contiene esta sustancia, según las investigaciones
de Olea—, el problema afecta principalmente a quienes trabajan en constante
contacto con este tipo de material. "He recibido llamadas del personal de
un hospital para preguntarme qué podían hacer porque todas las recetas se
hacían con papel térmico. También de un controlador aéreo, que hace todos los
informes de vuelos con este material", asegura Olea.
La única forma de evitar
los daños del BPA a la salud es no estar expuestos a él. Precisamente por esto,
Francia decidió legislar el uso del bisfenol A en el papel térmico y prohibir
su uso. "Lo hicieron para proteger sobre todo a quienes trabajan en las cajas
de tiendas y supermercados, que en su mayoría son mujeres, el grupo de mayor
riesgo por las consecuencias que tiene en el embarazo", aclara el experto.
La Unión Europea (UE) también decidió restringir su uso en 2016 en una ley que
se hará efectiva en 2020.
(…)
Por si sus efectos
sobre la salud fueran pocos, el BPA también tiene consecuencias sobre el medio
ambiente. "Al reciclar este tipo de papeles, la sustancia se libera y
contamina el proceso de reciclaje porque la pasta de papel que se hace se llena
de bisfenol A", explica Julio Barea, responsable de la campaña de
Reciclaje de Greenpeace, quien explica que también se libera y pasa al medio
ambiente: "Por ejemplo, se ha detectado en poblaciones de caimanes que
nacían con malformaciones". La solución es clara, coinciden los expertos:
buscar alternativas que no sean dañinas para la salud. "No como el
bisfenol S (BPS), que se está usando en Francia y es igualmente tóxico, pero no
está regulado", concluye Olea.
VERDADERO O FALSO:
- EL BISFENOL A ES UNA SUSTANCIA QUE NO CAUSA DAÑOS EN LAS EMBARAZADAS.
- ALGUNOS RECIPIENTES DE ALIMENTOS HAN LLEGADO A CONTENER ESTA SUSTANCIA.
- ES UN PROBLEMA QUE SOLO AFECTA A LA POBLACIÓN ADULTA A TRAVÉS DE DETERMINADOS PRODUCTOS.
- ESTA SUSTANCIA PERJUDICA EXCLUSIVAMENTE A PROFESIONALES DE DETERMINADOS SECTORES LABORALES.
- EN ALGÚN PAÍS DE LA UNIÓN EUROPEA (UE) YA SE HA PROHIBIDO SU USO.
- ESTA SUSTANCIA NO AFECTA AL PROCESO DE RECICLAJE.
- YA EXISTEN ALTERNATIVAS VÁLIDAS, COMO EL BISFENOL S QUE NO CONTAMINA.
(Fúndeu BBVA, https://www.fundeu.es/recomendacion/ticket-tique-tiquete/)
SOLUCIONES
1 F, 2 V, 3 F, 4 F, 5 V, 6 F, 7 F